International Relations

Repaso del Béisbol Internacional

Por Mark Langill

Hay obvios legados asociados con Walter O’Malley, el hombre de negocios, el abogado, el ejecutivo de béisbol y el hombre de familia. Pero a través de toda la vida de O’Malley, el espíritu innovador que previó la construcción del Estadio de los Dodgers conjuntó otras grandes ideas acerca del “pasatiempo nacional” de su país desde el Sur de California hacia todas las partes del mundo. Si los deportes del mundo fueran la ostra de O’Malley, el béisbol sería su perla.

Los Dodgers se unieron a la Liga Nacional en 1890 y en los 60 años que precedieron a la llegada de O’Malley como presidente del equipo, tuvieron ocasionales intervenciones internacionales. El primer lanzador estrella cubano de las grandes ligas, Adolfo Luque, estuvo en Brooklyn brevemente durante las temporadas de 1930 y 1931. Los Dodgers operaron un equipo afiliado de Triple A en Montreal y tuvieron su entrenamiento de primavera en Cuba (1947) y en la República Dominicana (1948) antes de establecerse en su actual centro de operaciones Dodgertown en Vero Beach, Florida.

Los Dodgers, que ya eran una franquicia popular en América cuando O’Malley se convirtió en su líder gracias al éxito en el campo y personalidades dignas de recordarse, llegarían a ser reconocidos a través de todo el mundo como una de las franquicias más estables y progresivas de la liga mayor.

Durante las siguientes dos décadas, los Dodgers usaron sus estadios de temporada regular, el Ebbets Field en Brooklyn y más tarde el Estadio de los Dodgers en Los Angeles, como destino para su lista creciente de dignatarios extranjeros.

Los viajes de buena voluntad del equipo al Japón después de las temporadas ganadoras del campeonato en 1956 y 1966 ocasionaron la visita de los Gigantes de Yomiuri a Dodgertown en 1961, 1967, 1971 y 1975.

En su primer año como presidente de los Dodgers en 1951, O’Malley invitó a representantes del club Cervecería Caracas de la liga venezolana, junto con 400 cadetes venezolanos como invitados de los Dodgers mientras los venezolanos estaban en Nueva York para celebrar el día de Simón Bolívar el 19 de abril. Esta sería la primera de muchas invitaciones de O’Malley para visitantes internacionales al Ebbets Field. Cuando 75 marineros israelitas visitaron Ebbets Field en junio de 1951, O’Malley los envió a casa con un cargamento de equipo para jugar béisbol.

En 1952, O’Malley propuso un recorrido por el mundo con los Indios de Cleveland de la Liga Americana. El Comisionado Ford C. Frick anunció, en la víspera del Juego de las Estrellas en Filadelfia, que los dueños de la liga mayor habían dado la autorización y que el departamento de estado tenía entusiasmo acerca del plan. Los dueños también mitigaron una regla que usualmente prohibía recorridos de exhibición solamente.

Los totales estimados incluyeron 240,000 dólares para pagar el avión y 500,000 dólares para los 22 juegos programados en 60 días con visitas a Hawai, Japón, India, Egipto, Australia y el Norte de África, cubriendo más o menos 35,000 millas en el aire. “Nos gustaría que el recorrido cubriera sus propios gastos ,” dijo O’Malley. “A menos que sea una cosa buena para el país y el béisbol, no nos gustaría hacerlo”.Long Island Press, julio 08 de 1952

El recorrido no se materializó, pero los planes alentaron discusiones para otras formas de promover el deporte entre otras naciones. Para cuando los Dodgers obtuvieron su primer campeonato después de una emocionante victoria en siete juegos sobre su rival los Yankees de Nueva York en la Serie Mundial de 1955. El buzón de O’Malley estaba lleno de muchas tarjetas postales internacionales.

El 2 de diciembre de 1955, O’Malley envió la siguiente carta a su Majestad el Rey Faisal II al Palacio Real en Bagdad, Iraq.

“Su Majestad, muchas gracias por su cablegrama de felicitaciones por nuestra victoria en la Serie Mundial. Ello renovó memorias felices de sus visitas a Brooklyn y Ebbets Field. Una de nuestras mayores causas de emoción al ganar nuestro primer Campeonato Mundial fue el saber que trajimos alegría para muchos de nuestros amigos alrededor del mundo como está evidenciado en cartas de 26 países diferentes. Espero que cuando visite nuestro país otra vez, incluya otra visita al Ebbets Field en su itinerario. Espero que esta carta lo encuentre con la mejor salud. Sinceramente, Walter O’Malley.”

Sotaro Suzuki, un escritor japonés de deportes quien trabajó muy de cerca con el publicista Matsutaro Shoriki del periódico Yomiuri Shimbun, el padre del béisbol japonés profesional, pasó tiempo con la organización de los Dodgers empezando con las primeras negociaciones y discusiones respecto al recorrido de buena voluntad por Japón en 1956. Suzuki visitó Dodgertown y Ebbets Field. Cuando el estadio de los Dodgers abrió en 1962, Suzuki fue un invitado especial de O’Malley y los Dodgers de Los Angeles. Suzuki marcó la ocasión encargando una linterna de piedra la cual fue enviada desde Japón hasta el estadio de los Dodgers en 1966.

Después del recorrido por Japón en 1956, los Dodgers invitaron a Shigeru Mizuhara, manejador de los Gigantes de Yomiuri, junto con el lanzador Sho Horiuchi y el receptor Shigeru Fujio para entrenar con los Dodgers en Vero Beach. En 1959, los Dodgers invitaron a todos los Gigantes de Yomiuri para entrenar en Vero Beach.

Suzuki sirvió como intérprete en el paseo a Vero Beach en 1957 y después escribió un ensayo acerca de la reacción de los Gigantes sobre el campo de entrenamiento americano. Uno de los jugadores preguntó si cada equipo de la liga mayor tenía el mismo formato de entrenamiento de primavera como los Dodgers.

“Yo respondí con una sonrisa y le aclaré que Dodgertown era excepcional,” Suzuki escribió. “Solamente los Dodgers tenían dichas instalaciones únicas en donde ellos eran capaces de entrenar a sus once clubes de ligas menores además del club de padres y los Gigantes de Tokio también. Su sistema de entrenamiento es muy diferente al de otras organizaciones de béisbol y mucho más caro. Pero esta rutina probó ser muy exitosa con el advenimiento de algunas estrellas como Craig, Drysdale, Koufax, Podres y Williams en el departamento de lanzadores; Camilli como receptor; Gilliam, Hodges, Larker, Neal y Wills para posiciones del cuadro; y Znider, Demeter, Davis y Howard como jardineros.

“Además, le expliqué a mi joven novato, debido a la estructura magnífica y la caballerosidad de Walter O’Malley, presidente de los Dodgers de Los Ángeles, los Gigantes de Tokio recibieron esta maravillosa oportunidad de tomar parte en el campo de entrenamiento más fino y aprender de primera mano los métodos del club más ganador de la Liga Nacional.”

En 1962, el entrenador de béisbol japonés Kaoru Betto viajó la temporada entera con los Dodgers, estudiando el método americano de entrenar y jugar. Los Dodgers también extendieron una invitación de entrenamiento en primavera en 1962 para Boudewijn Maat, un extraordinario jugador amateur de Holanda quien quería observar la organización de los Dodgers. El entrenador de los Dodgers de la liga menor Pete Reiser visitó Japón en el otoño de 1963 para entrenar al equipo Tokio (Toei) Flyers.

El director de buscadores de los Dodgers Al Campanis invirtió tres semanas en 1964 con el equipo Taiyo Whales en el entrenamiento de primavera. El entrenó a los jugadores japoneses como lo escribió en su libro más vendido, “La Manera de Jugar al Béisbol de los Dodgers”.

En enero de 1966, O’Malley predijo que las ligas mayores algún día se expandirían a Canadá. Los Dodgers operaron su afiliado de Liga Menor en Montreal hasta 1960. “Pienso que veremos a alguien traer una franquicia a Toronto o a Montreal”, él dijo. “El mercado canadiense está totalmente abierto. Si la política internacional se estabiliza, podríamos ver a un equipo en algún lugar de Centro América. Y con los avances que se han hecho en la transportación, probablemente en Japón también. Usted ya puede volar de los Estados Unidos a Tokio en menos tiempo del que tomaba a los Dodgers para ir de Brooklyn a San Luis por tren”.

“Probablemente no veremos béisbol de Grandes Ligas en Australia en toda mi vida. Pero podría darse. Hay un gran interés por el deporte en ese lugar”New York Journal-American, 20 de enero de 1966

O’Malley reseñó sus ideas sobre la expansión de la Liga Mayor en una entrevista en marzo de 1968 con el editor de deportes de Los Ángeles Times Paul Zimmerman. En un año el béisbol de la Liga Mayor cambiaría su formato divisional e introduciría una serie de campeonato de liga, la cual doblaría los participantes de la postemporada de dos a cuatro equipos. La Liga Nacional le daría la bienvenida a los equipos de expansión de los Padres de San Diego y a los Expos de Montreal en 1969.

Pero el enfoque del entrenamiento de primavera de 1968 se centró en si la Liga Nacional se expandiría de 10 a 12 equipos como su contraparte en la Liga Americana. Los candidatos incluyeron Dallas-Forth Worth, San Diego, Búfalo, Montreal y Milwaukee. Esas discusiones indicaron el éxito y la creciente popularidad del Deporte después del histórico cambio a California de los Dodgers y los Gigantes. En 1957 no hubo equipos de Grandes Ligas en la Costa Oeste. Un equipo de expansión para San Diego en 1969 le daría a California 5 equipos de Grandes Ligas — los Dodgers, Angels, Athletics, Gigantes y Padres.

“¿Tendrías Béisbol de Grandes Ligas en la costa sin el aeroplano? La respuesta es no”, dijo O’Malley .

O’Malley especuló que hubo por lo menos dos ciudades en Japón que estaban listas para apoyar una franquicia de Grandes Ligas usando el siguiente criterio: estadio, talento del jugador, sustento económico, público entusiasta y un gran apoyo de la prensa.

“Japón tiene una abundancia de talento, una área en la cual nosotros en los Estados Unidos estamos escasos”. Él dijo. “Ellos pueden tener uno o dos equipos ahora que pueden vencer por lo menos a la mitad de nuestros equipos”.

“Nunca nadie ha dado una razón válida de por qué nosotros no podemos tener equipos de Grandes Ligas ya sea en Montreal o Toronto”.

Back to top

TRANSLATE THIS PAGE

  • The Dodgers traveled to Havana, Cuba for their spring training camp in 1947.
  • The Tokyo Yomiuri Giants made their first team appearance at Dodgertown in Vero Beach in 1961. They made subsequent visits in 1967, 1971 and 1975. In 1967, National League President Warren Giles, Walter O’Malley and Dodger interpreter and goodwill ambassador Ike Ikuhara greet some uniformed Giants players for training at Dodgertown.
  • Walter O’Malley and King Faisal II of Iraq watch the Dodger game on Aug. 13, 1952 at Ebbets Field. It was the first baseball game that the young King had seen in person.
  • Sportswriter Sotaro Suzuki and Walter O’Malley visit with youngsters during the 1956 Dodger goodwill tour to Japan.
  • Sotaro Suzuki is greeted upon arrival in Vero Beach in 1957 by Walter O’Malley, Terry O’Malley and Dodger team photographer Herb Scharfman.
  • Sotaro Suzuki, Walter O’Malley and Japanese all-time home run leader Sadaharu Oh of the Yomiuri Giants.